El Chimichurri, la salsa estrella de los asados
No podemos hablar de salsas y de Argentina sin hablar de la reina de las salsas: la salsa Chimichurri. Es verdad que hay tantas recetas de la salsa Chimichurri como argentinos, pero podemos decir que es una salsa que se utiliza como aderezo en carnes a la parrilla y todo lo que se nos ocurre y cuyos ingredientes básicos son el vinagre, perejil, ajo, ají molido y la sal. Es una salsa más bien fuerte e intensa con la que se suele “pintar determinadas piezas que ponemos en la parrilla o para acompañar los chorizos criollos solo o en un pan. Lo que solemos llamar choripan. También se suele acompañar con la carne al plato.
Pero, ¿De donde viene ese nombre? Seguro que muchos piensan en las antiguas civilizaciones y en su gran legado, pero según cuenta alguna historia su origen es mucho más peculiar. El Chumichurri viene de Jimmy Curry o James MCCurry, un comerciante del siglo XIX inglés o irlandés interesado en importar carne argentina al Reino Unido. Un día lo invitaron a un asado criollo y él, para corresponder preparó un aderezo para acompañar la carne asada. Parece ser que el origen del Chimichurri tiene relación con la salsa Worcestershire. Como tuvo tanto éxito, la receta se fue pasando de unos a otros y transmitiéndose junto con el nombre de su creador: “yimicurri” que terminó trasformándose en el ya mítico: Chimichurri
De todos modos, es complicado establecer el origen exacto del nombre, y decir que esta relacionado a un hecho concreto, lo más probable es que simplemente haya sido derivación de antiguas palabras indígenas o españolas ya olvidadas.
He aquí uno de nuestros mayores legados: Nuestra receta de Chimichurri:
1 cucharada de orégano fresco, 1 cucharada de ají molido, 1 cucharada de pimentón dulce, mucho perejil bien picado, como una taza, 4 dientes de ajo, sal y pimienta negra a gusto. Mézclalo todo en un bol con vinagre y un poco de aceite de oliva y remueve para mezclar todo bien.
Muchos argentinos añaden cebolla tierna, tomillo o mostaza. Igualmente hay quien prefiere hojas secas y otros frescas. Ahí podés dar rienda suelta a tu creatividad.
Gracias por la receta. ¡Os la copio!
De nada Marta.
Para nosotros es un placer compartirlo y un gusto que nos copies y nos difundas a través de tu blog.
Un saludo.
Gabriel.